martes, 7 de enero de 2014

¿Qué ocurre con el poder?


¿QUÉ ESTÁ OCURRIENDO CON EL PODER?


Jeremy Rifkin, en La Tercera Revolución Industrial, plantea una interesante interpretación de la naturaleza de nuestra economía y, por ende, la semilla de su propia crisis. Hablaré en otro momento de su libro, aquí voy a adelantar un esquema de la estructura social del poder actual, basado en el origen de la energía, y por qué una nueva sociedad posible, con una economía realmente democrática, está resultando peligrosa para los actuales dueños del poder. Fíjense: no hay necesidad de cobrar lo que se cobra por la energía, ni de mantener la pirámide de gestores.




¿Ven alguna relación con la traba a las renovables y la obsesión de apropiarse de ella?
Pero, ¿por qué no se desmorona el poder y se impone esa nueva economía democrática?
Porque la economía no es la única forma de poder. Bertrand Russell (Power) habla de otras formas de poder: el poder bruto (la fuerza, las armas o el ejército), el poder de la propaganda (dominio de creencias y conciencias).
¿Qué estamos viviendo? Corrupción, abusos, pérdida de derechos y servicios, manipulación de la información… Estamos sumidos en un estado entre la indignación (fácilmente manipulable: se canaliza hacia nuevos “temas de controversia”) y el fatalismo (que igualmente se manipula con las inevitabilidad de las “medidas necesarias”). ¿Poder bruto? Impuestos, desahucios, paro, miedo a perder el trabajo…
En resumen, ¿cuál es el problema? No necesitamos el viejo poder. No sólo sobran los poderosos actuales sino que resulta costosísimo y dañino mantenerlos.
El cambio tiene que salir de la conciencia del pueblo, no de la violencia. Una sociedad consciente y culta sabe exigir. Comencemos por quitarles el poder de la propaganda, siendo críticos y reflexivos. Aunque oigamos y digamos tanto lo que les haríamos, que hay que ir a por ellos, etc., seamos inteligentes, seamos civilizados. Seamos nosotros los verdaderos dueños de lo que hace digno al hombre, que es el mayor poder.
El primer paso de concienciación:
Podemos tener el poder. No los necesitamos.