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jueves, 19 de diciembre de 2013


La ley del silencio

Ficha Técnica

Título original: On the Waterfront.
Estados Unidos, 1954.
Director: Elia Kazan.
Reparto: Marlon Brando, Eva Marie Saint, Karl Malden, Lee J. Cobb, Rod Steiger, Pat Henning, Leif Erickson, James Westerfield, John Heldabrand, Rudy Bond, Martin Balsam, John Hamilton.
Productora. Columbia Pictures. Productor: Sam Spiegel.

 

EL ARGUMENTO

En los muelles de Nueva York, el jefe del sindicato portuario, Johnny Friendly (Lee J Cobb), controla con métodos mafiosos la contratación de los estibadores; las personas que no transigen con él se ven así condenadas a la miseria. Pese a la ilegalidad de la situación, ésta se mantiene porque entre ellos impera la “ley del silencio”: quienes intentan denunciar la situación se enfrentan a ser asesinados.

El protagonista, Terry Malloy (Marlon Brando), un joven boxeador fracasado, es hermano de Charly Malloy (Charly “el señorito”), la mano derecha de Johnny, situación que le conecta con él como “protegido” para el que trabaja.

Atrapado en su entorno y forma de vida, Terry se deja llevar por la inercia y el conformismo. Su hermano mayor es su única familia y referente, y la obligada fidelidad a él le mantiene atrapado en esa inercia y en una negación de su propia conciencia, no sintiéndose capaz de enfrentarse a juzgar la inmoralidad o debilidad de su propio hermano.

La trama, centrada en la transformación y despertar del protagonista, se desencadena a partir de un acontecimiento: Terry se ve implicado involuntariamente en uno de los crímenes de Johnny, conduciendo a Joey Doyle a lo que será el escenario de su asesinato. Al impacto emocional de su conciencia se suman otros factores: conoce a Edie (hermana de Joey), por quien va a sentir una fuerte atracción. A través de ella recibe el mensaje y la perspectiva  del padre Barrie (Karl Malden) desde otro enfoque distinto al de su panda de mafiosos. Éste trata de animarlo para que acuda a los tribunales y cuente todo lo que sabe. Estos factores emocionales (el complejo de culpa y su amor por Edie) actúan como motores que van despertando su conciencia a la verdad de lo que ocurre y de su propia vida, produciendo en él una revolución moral que crece en tensión e intensidad con los acontecimientos, y que culmina al final de la película en un impactante desenlace.


COMENTARIO
 
La delación

La ley del silencio plantea como tema central el de la delación.
El tema de la delación es uno de los más controvertidos dilemas morales. ¿Se debe delatar una falta si no nos afecta directamente? ¿Dónde está la línea que separa ser honesto y ser chivato? En una situación así varios factores pueden complicar la respuesta: la relación con los culpables o las víctimas, la implicación en la situación… y la naturaleza de la situación misma.

La película maneja y retrata el impacto emocional de las palabras con que se plantea la cuestión: ser cobarde o valiente, leal o chivato. Dos enfoques interesados de un mismo dilema, que sólo puede resolverse analizando lo que esté en juego delatar y las motivaciones de tal delación.

En este caso el tema de la película se decanta de forma muy clara a favor del primer enfoque: se trata de una situación de abuso de poder, crímenes y coacciones que mantienen atenazados a cuantos se ven sometidos a ella, una situación con la que, moralmente, se impone acabar.

Como en todos los dilemas morales, la solución pasa por buscar y eliminar la ambigüedad argumentativa: el juego está en salir de la pregunta, mal formulada como dilema: si la delación es justa o no. La pregunta en sí encierra la trampa: no hay una respuesta única a si se debe o no “delatar” algo; dependerá de la naturaleza (perversa o justa, privada o pública, justificable o no) de lo que se trate de denunciar, y de la intención del que delata (si obra según su conciencia o según sus intereses), así como quizá de las consecuencias que de tal delación sean esperables. La ambigüedad está aquí, pues, en la misma pregunta, que encierra una falacia, porque obliga a una generalización errónea. La libertad de conciencia es, una vez más, la piedra angular que ayuda a enfocar este tipo de conflictos: ¿es libre Terry cuando obedece los deseos e intereses de Johnny o los de su hermano? ¿Qué verdaderos factores deciden su conducta?

El mismo director, Elia Kazan, fue acusado de utilizar el tema de la película para justificar su papel en la época de la llamada “caza de brujas” del senador McArthy. Muchos le acusaron de pretender comparar una banda de hampones con las víctimas de la persecución política que se vivió en esa época. Esa comparación es fruto de la generalización errónea de que hablábamos arriba, por lo que el dilema, más que resolverse, se disuelve al reformular los términos que hacen moral o inmoral una u otra conducta.

La evolución Moral

Bajo el tema patente y explícito de la delación se encierra otro más interesante y veraz: el del despertar de la conciencia moral de su protagonista, que responde a la cuestión de ser fiel a sí mismo. El protagonista, Terry, está atrapado en un contexto social desde el que ha crecido y que ha sido su única herramienta para enfrentarse al mundo. A modo de coraza, Terry se forja una imagen sobre las personas a las que está sometido: un hermano protector al que se siente leal, una fidelidad al poderoso que les da de comer y al que se obliga a sentirse agradecido para no reconocer su sumisión… Todo ello es fruto de su propio contexto.

Su vida se va desvelando en distintas escenas y conversaciones; desde pequeño ha vivido en un entorno agresivo donde se impone la lucha por la supervivencia. Su padre muere asesinado y su hermano mayor queda como su único referente. Éste, Charley, ha ido cayendo por una pendiente de corrupción víctima del mismo contexto, donde el único objetivo visible es sobrevivir del mejor modo posible: al lado de los poderosos.

Todo ser humano posee un umbral de la moral: ese punto donde los valores empiezan a pesar más que los intereses. En el caso de Charley el freno a su corrupción se impone cuando se ve obligado a mandar a la muerte a su propio hermano, al que ha criado.

El crimen en el que Terry se siente implicado involuntariamente le sacude emocionalmente y le obliga a plantearse sus verdaderos valores. Se retrata el despertar de su conciencia, despertar en el que interviene un factor externo: su encuentro con Edie Doyle (Eva Marie Saint). Ella le hace patente un discurso y una mirada vital distintos y opuestos a los únicos de que ha dispuesto hasta entonces.

El tema de la redención moral a través del amor es un clásico de arte, muy usado tanto en el cine como en la literatura (queda reflejado en estado puro en el mito de Don Juan). Hay también guiños a los obstáculos contra el amor verdadero, como en Romeo y Julieta. Pero aquí no hay Montescos ni Capuletos; no se trata de bandas rivales al mismo nivel, sino de una lucha del bien contra el mal, de la honestidad contra la corrupción y el abuso de poder.

Pero no es el mero amor a Edie lo que le transforma. La evolución que vive Terry es más bien un despertar del autoengaño en que está sumido. Edie es sólo una luz, una promesa de otra vida posible, de sus propios deseos, de sus propias tendencias. Su confesión ante las autoridades no es fruto sin más del deseo de Edie (de hecho, cuando va a verla le dice que “no hará” lo que ella quiere), ni tampoco la presión del sacerdote. La sed de venganza que se apodera de él por el asesinato de su hermano (a quien también quiere) es el empuje final, que el sacerdote canaliza hacia esa acción, en lugar del mero asesinato que planea, siguiendo el único código que conoce. Tras confesar la verdad sufre más presión que nunca: sus “amigos” le dan la espalda, le marginan en el  trabajo, la propia Edie le sugiere que huya… Pero Terry descubre su fuerza. Su enfrentamiento a Johnny es revelador: “me he estado traicionando a mí mismo”; ahora puede contestarle: no es él el donnadie de que le acusan.  Solo frente a todos y frente a todo, se da cuenta: Johnny es ahora el pobre hombre; “sin tu revólver y tus matones no eres nada”.

 El papel de la sociedad

La sociedad como elemento protagonista está aquí representada por los estibadores, trabajo en el que se ocupan la mayoría de los habitantes del barrio portuario donde se desarrolla la trama.

Junto con la evolución moral del individuo y los factores que motivan su conducta, es también fundamental analizar los factores que mueven a un colectivo y el modo en que este colectivo influye tanto en la educación como en el desenvolvimiento del individuo.

La ley del silencio no viene impuesta sólo desde arriba, desde el abuso de poder de Johnny Friendly y sus compinches, sino también desde abajo y en paralelo a quienes están sometidos a ella. Los intereses de los beneficiados y el miedo de todos generan ese “valor” nocivo, que impone el adjetivo peyorativo de “chivato” a quien se atreva a cuestionar las normas implícitas establecidas. Miedo, inercia, impotencia y egoísmo, son los primeros cimientos de esa conducta sumisa y cobarde. Los pocos que alguna vez han intentado denunciar han muerto: la situación se asume con fatalismo hasta enquistarse como norma de conducta.

Hacer evolucionar a la sociedad es aún más difícil que al individuo, aunque una vez surge el detonante el enardecimiento se contagia. Aparecen a menudo retratadas miradas pasivas, huidizas o cómplices de los estibadores, haciendo del entorno social con sus impulsos colectivos un protagonista más de la película: el triunfo final se refleja en ese cambio de la sociedad, cuando los estibadores despiertan como despertó Terry (y gracias a él) y se vuelcan en su apoyo, culminando en ese cambio social metafórico que supone la total victoria de Terry, transformado de fracasado en héroe triunfador.

miércoles, 2 de mayo de 2012

"Pequeño gran Hombre", una visión rousseauniana de la civilización y del proceso de socialización

     El ideal del "buen salvaje" de Rousseau es una utopía difícilmente ilustrable, en la medida en que todo ser que conocemos está inserto en una civilización determinada. Pero la crítica a las secuelas de la civilización occidental (sus valores negativos, que mejor supo cristalizar Nietzsche) sí dejan cierta huella de comprensibilidad, y por supuesto de un halo romántico, en quienes se acercan a ese concepto de "buen salvaje". Para dar masa a este ideal rousseauniano creo que no hay mejor película, ni de más excelente categoría, que "Pequeño Gran Hombre" (1970), de Arthur Penn, con Dustin Hoffman como protagonista. Dejo aquí algunos fragmentos que he encontrado, pero recomiendo fervientemente ver la película completa para entender su carga. Si la crítica de Rousseau a la civilización en sí, en su evolución intrínseca, me parece cuando menos ingenua, su comprensión desde el punto de vista del choque de civilizaciones, como se hace en esta película, me parece que ayuda en gran medida a acercarnos a la raíz última de la naturaleza humana y su inevitable componente social y cultural.
lbm from Darko03 on Vimeo.



Pero como no me gusta ser maniquea, creo que hay que saber enfocar también la otra cara de la moneda. Y quién mejor que Voltaire para contestar con finura y sarcasmo a la exacerbada y casi fanática defensa de Rousseau del buen salvaje. Ahí os dejo este pequeño comentario, a modo de apéndice, y para serenar la romántica exaltación rousseauniana. Respuesta de Voltaire a Rousseau sobre su ensayo "discurso sobre la desigualdad", (1754):

He recibido su nuevo libro sobre la especie humana y le doy las gracias por él. Nunca se ha empleado tanta inteligencia en el designio de hacernos a todos estúpidos. Leyendo su libro se ve que deberíamos andar a cuatro patas. Pero como he perdido el hábito hace más de sesenta años, me veo desgraciadamente en la imposibilidad de reanudarlo. Tampoco puedo embarcarme en busca de los salvajes del Canadá, porque las enfermedades, a que estoy condenado, me hacen necesario un médico europeo; porque la guerra continúa en esas regiones; y porque el ejemplo de nuestras acciones ha hecho a los salvajes casi tan malos como nosotros.

sábado, 24 de marzo de 2012

Diálogo sobre la belleza: Muerte en Venecia

SOBRE LO APOLÍNEO Y LO DIONISÍACO

      Estos conceptos que Nietzsche toma de la cultura griega intentan dar rostro a una de las facetas más fascinantes y desapercibidamente relevantes de la vida: la belleza; el arte; el placer estético, faceta relegada en nuestra consciencia por la fecundidad de la ciencia, la tecnología y los avances y poder que suponen.
      Platón identificaba la belleza el bien, la verdad, la contemplación de lo ordenado (lo inteligible) a través de los sentidos, contemplación que produciría armonía en el alma. Siglos más tarde, Kant introdujo el concepto de lo sublime: el sublime matemático (la grandiosidad de lo inconmensurable, como las estrellas del cielo) y el dinámico (la grandiosidad de las fuerzas de la naturaleza.
     Volviendo al espíritu de la tragedia, lo irracional, lo inconsciente, Nietzsche toma estos dioses para expresar dos aspectos de la belleza: las formas y la armonía, frente a la materia de la belleza, lo salvaje, lo libre, lo natural.
     ¿Es la belleza un acercamiento a lo intelectual, la perfección, o un abandono a las raíces tenebrosas de lo inconsciente y desmesurado? ¿Imita el arte la fuerza dinámica de la naturaleza o busca lo eterno?
     La belleza es sin duda es subyugante. Pero esa subyugación, ¿es liberadora o destructiva? El impacto de lo salvaje, espontáneo y natural en nosotros, ¿nos reduce al "ello" freudiano" o nos sumerge en las raíces metalógicas de nuestro ser?

He aquí una perfecta ilustración sobre lo apolíneo y lo dionisíaco, los dos rostros de la belleza. Y quien vea la película entera, encontrará además una expresión de la belleza en sí misma.

lunes, 28 de junio de 2010

DÉJAME ENTRAR


Película enigmática donde las haya, se ha tendido a clasificarla dentro del género de terror, pero no hay nada más engañoso. Se trata más bien de un thriller psicológico, donde el realismo del formato se funde por completo con lo fantasioso de la trama hasta crear una homogeneidad inusitada que trasciende cualquier etiquetado. Es una de las mayores y solapadas virtudes de este film: la sublime fusión de contrarios en multitud de ámbitos: en el artístico (realismo descarnado con solapada ficción gótica), en la trama (retrato psicológico de la marginalidad y el acoso a través de la amistad entre un niño y una vampiro), en las emociones (horror y pureza, brutalidad y ternura), en la moral (constante fusión y confusión del bien y el mal)... De este modo se resquebrajan todos los maniqueísmos establecidos, dejando al espectador en un estado de perplejidad emocional.
La película presenta una perspectiva arquitectónica del espacio vital. En este escenario escandinavo, las vidas transcurren en una multitud de ámbitos aislados. Los espacios se multiplican y se esconden unos de otros. El espacio intermedio, siempre nevado, resulta fronterizo. En ese espacio vacío de actividad vital se conocen los niños, de noche: como si el encuentro tuviera que darse en un mundo intermedio entre la realidad y la ficción. Un espacio como vacío de vida que hay que atravesar para llegar a otro espacio cerrado, protegido, encerrado en sí mismo. Cada edificio, cada habitación, separa acontecimientos, vidas e intimidades. Un retrato sencillamente realista crea la atmósfera adecuada para hablar del aislamiento, de la sensación de burbuja, de mundo interior, una atmósfera que culmina en la escena final de la piscina, en la que todo el horror se presenta de forma absolutamente aséptica, de golpe, eliminando todo sonido al introducir el plano en el interior del agua. 
Con tal escenario el espectador está ya anímicamente introducido en la soledad del niño, en su miedo incomunicable. Si de algún modo es una película de terror no lo es tanto por el tema del vampirismo, sino sobre todo por el de esa soledad impotente producida por el acoso que sufre. Miedo y deseo, soledad y relaciones imposibles, urden la temática profunda de la película. Todo ello fusionado como piezas indivisibles, como caras de la misma moneda. La vida se alimenta de la muerte; la amistad que aquí surge se alimenta de la marginación. Especialmente impactante resulta la mirada beatífica del niño en las dos escenas en que consigue superar los ataques a que se le somete. No hay crueldad en sus ojos, ni expresión de triunfo, desafío, venganza... Sólo una profunda expresión de beatífica paz. Esa imagen del brazo mutilado lanza de una sola vez al espectador una sensación de terror y de alivio por su salvación. No da tiempo a juzgar lo que se ha sentido.
El tema del acoso es abordado desde la perspectiva de la imaginación infantil. La niña vampiro parece cumplir el papel de ese amigo imaginario que crean muchos niños para llenar su intimidad. El deseo de liberación, más que de venganza, puede llevar a soñar con que los enemigos son destruidos, desaparecen... Un protector desconocido por todos, con poderes especiales, responde a ese esquema de imaginería psicológica creada por las circunstancias de aislamiento y pánico a que está sometido. Pero no se retrata con tanta explicitud: a ese amigo imaginario se le da una identidad y se le crea una vida, unas circunstancias que resultan paralelas a las del propio niño. Un protector cuyo papel los demás desconocen, una persona que desea su amistad y que la salva previamente, como luego ella le salva a él. Al amigo imaginario se le da una identidad real, o casi real, porque se introduce el elemento fantasioso (el vampirismo) en una atmósfera cargada de realismo, tanto estético como psicológico. Todo con la ambigüedad moral del sacrificio ajeno, de la muerte de gente (salvo excepciones) inocente, factores inevitables para la supervivencia de la niña.
En definitiva, una película inusitada, realmente original y con una profundidad sin estridencias, de las que te hablan desde rincones profundos del alma sin que uno se dé cuenta de los intersticios por los que se ha infiltrado ahí.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Matar un ruiseñor


MATAR UN RUISEÑOR
(Basada en la novela de Harper Lee)



---------Matar un ruiseñor es una de las películas más entrañables, profundas y ejemplares que ha dado el séptimo arte. No ignoro que estos valores de contenido tienen su principal mérito en la autora de la novela, Harper Lee, pero la película ha sabido traducirla a un lenguaje visual sutil, emotivo y sin empalagos, sin atisbos de esa vanidad de autor que en ocasiones empaña el amor a la verdadera finalidad del arte: la obra en sí.
-------Sin estridencias, sin aleccionamientos, sin el más mínimo rastro de autocomplacencia, Atticus Finch se imprime en la retina y en el corazón del espectador como una figura edificante. Su intachable altura moral no acompleja, sino que complace y gratifica. Antes que acusar comprende, antes que juzgar enseña, del único modo verdadero en que se enseña la moral: con el propio ejemplo.
El despliegue de actitudes vitales, de choques de intereses y principios, de valores sociales y universales, están tan perfectamente entramados que el film, lejos de apabullar, adquiere un tono humilde y tierno, como si cada uno de nosotros fuéramos guiados, como los niños, por ese camino de la vida que no tiene otro sentido que la formación de la propia personalidad a través de la comprensión de los otros y de uno mismo.
.............A esta edificante ilustración de sensatez e integridad se suma en el film como valor añadido el ser un reflexivo y fiel retrato de una época, con sus prejuicios y estilo de vida.




TEMA Y ARGUMENTO

En un pueblo ficticio de Alabama, Maycomb, Jem y Scout Finch, junto con su amigo Dill, vivirán durante un verano como una experiencia apasionante y reveladora el juicio que se celebra contra Tom Robinson, acusado de violar a una mujer blanca. Paralelamente, en sus aventuras infantiles se verá involucrada la figura de un vecino misterioso que acabará viéndose imbolucrado en la resolución de la trama: Boo Radley.



..........La película plantea, entre otras cosas, la relación entre los valores morales en sí y los códigos sociales, tanto –y fundamentalmente– implícitos –la deshonra de desear a un negro, la presunción de su inferioridad moral...– como explicitados en las leyes. Pero es sobre todo un retrato de la formación y el desarrollo moral de los niños. Intereses, pasiones, principios y prejuicios se presentan ante los ellos como algo adulto, misterioso, por desentrañar.
En el argumento podemos distinguir dos tramas:
· En primer plano, la vida y peripecias de los protagonistas, los niños: su enfoque de la vida, su formación moral a través de su relación con su padre Atticus y, paradójicamente añadido, con Boo. En este plano nos enfrentamos al problema de la formación de los valores contrastando dos figuras opuestas: por un lado, la integridad de un hombre culto (Atticus), que muestra su integridad a través del lenguaje con el que instruye, y de la racionalidad con que demuestra en el juicio la inocencia de su acusado. Por otro lado, la nobleza de un personaje carente de cualquier tipo de formación, no sólo intelectual sino también social (Boo).
· En segundo plano, insertado en el primero y formando parte de la trama de aquél, está la trama del juicio contra Tom Robinson. Aquí se trata la relación entre los valores universales y los culturales, la imbricación y hasta confusión de ambos en las mentes individuales y la influencia de la sociedad y el ambiente en la formación de los valores, Este tema está encarnado en el contrapunto que nos ofrecen los personajes de Mayella y Robert Ewell, personas primarias y miserables, en los que los intereses propios, los miedos y el egoísmo constituyen su motor de acción, tanto social como individual.
,,,,,,,,,,Contrastando estos personajes con el de Boo, la película (y la novela) nos ofrece una encarnación para ilustrar el planteamiento de si la moral es o no independiente del conocimiento, y junto a esto si es o no innata –tema que se podría enfocar en la actualidad desde la perspectiva de la genética–.

LOS PERSONAJES

Niños (Jem, Scaut, Dill): representan un estadio en que la moral se está aún formando y los valores se confunden unos con otros: los morales, los sociales, los egoístas... En principio les vencen los valores externos, de apariencia: quieren un padre al que admirar por su prestigio y reconocimiento en las facetas que ellos valoran. Varias escenas ilustran este aspecto: la del perro rabioso, cuando Jem se sorprende tanto de que su padre posea una de esas cualidades admirables para los niños, de la que podría tan bien haber presumido; en el juicio, cuando es un negro quien les hace levantarse cuando su padre abandona la sala, haciéndoles partícipes del profundo respeto que ha despertado en todos.
Por otro lado, son el punto de vista –la perspectiva– desde el que se desarrolla la trama y en cuanto tal representan el enfoque neutral, objetivo, el punto de fuga desde el que se enfocan exteriormente los conflictos. Estéticamente es una manera de dar profundidad al relato. En este aspecto destaca la niña –la novela es una autobiografía parcial de la autora; como curiosidad, el personaje del niño vecino era en la realidad Truman Capote–.

Atticus Finch: representa la autonomía moral, la integridad absoluta, al margen del honor y la recompensa de cualquier tipo. Su talante se ilustra en la escena donde justifica su aceptación del caso y en la escena de la escopeta, cuya única finalidad es el retrato del personaje. Inspirador de un profundo respeto –representado en la puesta en pie del público negro– es, sin embargo, un personaje difícil de imitar por el que raramente alguien se cambiaría, ya que antepone siempre el deber y la justicia a todo tipo de honores y recompensas –tentaciones a las que pocas personas escapan–, sacrificándolos incluso si es necesario; algo que se ilustra a la perfección en la humildad y amabilidad con que trata al hombre a quien defendió gratis, y que intenta pagarle de algún modo con un saco de frutos.
Su actitud final, cuando su hijo puede ser acusado de asesinato, es un ejemplo culminante de moral kantiana: el sentido del deber se antepone a lo que hubiera sido una natural debilidad paterna de ocultar algo que tanto podría perjudicar a su hijo. En última instancia, todos sabemos que lo hace por él: alguien que valora tanto la moral sabe que lo mejor para su hijo es enfrentarse con altura a la vida.

Robert y Mayella Ewell: carentes de moral, son los causantes del juicio que da pie al argumento de la película. Miserables, incultos, plantean el dilema de la relación entre la pobreza y la posesión de valores morales. El padre parecería más poseedor de una maldad innata, mientras que la hija da una imagen más inclinada a ser víctima de sus circunstancias –aspecto ilustrado por el discurso de Finch en el juicio–; es obvio que en ella vence el miedo y el interés propio sobre su débil y nunca desarrollada moral; su conducta parece regida meramente por impulsos y deseos primarios e inmediatos.

Boo Radley: representa la inocencia, una moral en bruto y, en cuanto tal, innata, ya que no ha sido modelada por el conocimiento y la razón –de los que en cierto modo carece–. En cuanto inocente, parece desconocer la diferencia entre el bien y el mal, al menos en la medida en que éstos se adquieren en sociedad, pero instintivamente arriesga su vida por salvar la de los niños. Parece ejemplificar la idea de que existan valores morales universales innatos y que la naturaleza de la moral consiste en sentimientos, inclinaciones naturales, más que en la razón. Efectivamente, la raíz última de la moral parece tener relación con el amor altruista y la empatía. ¿Es así, es Boo un representante de una moral primaria fruto de su inocencia, o es un personaje amoral –que no inmoral– por regirse únicamente por sentimientos? Éste es uno de los puntos donde la moral kantiana produce cierta desazón y sensación de frialdad: el desprecio de los sentimientos, porque el amor a los demás no deja de presentarse, aunque sea intuitivamente, como uno de los aspectos más nobles y hermosos del ser humano. Recordemos el discurso de Fedro en el Banquete de Platón, donde se hacía de él el pilar de la convivencia social.



¿Es Atticus Finch la encarnación de la moral tal y como la presenta Kant? Desde luego que sí. Pero hay más en él. Como modelo humano, es también un punto de inflexión para establecer una crítica, o quizá una edificación más completa, sobre esa ética depurada, prístina y pulida, y ahondar más en sus raíces emocionales. Algo nos dice que esa inocencia moral de Boo está presente en la raíz de todo aquél que es capaz de edificarse moralmente, y a través de su razón, a sí mismo.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Match point y la vida de los otros

LA CONCIENCIA AL MARGEN DE DIOS


MATCH POINT Y LA VIDA DE LOS OTROS







...........Puede que sorprenda que relacione estas dos películas de autores, argumento y ambientación tan dispares. Pero hay algo en su tratamiento de las motivaciones humanas que las convierte en contrapunto ideal para explicar el conflicto entre el interés y la moral como los dos platos de la balanza de la conducta humana.






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..................La conciencia es la gran protagonista implícita en ambas películas. No sólo en cuanto es el punto de análisis de los protagonistas de ambas, sino en cuanto que ambas dialogan con la conciencia del espectador para que éste se involucre en ellas.
Match Point es una especie de culminación de un tema recurrente en el cine y la literatura: el castigo que nuestra conciencia exige al delito cometido. Anímicamente, exigimos a la vida que los malvados sean castigados. El arte intenta meterse en la conciencia del criminal, a la vez que exige que las circunstancias de la vida rediman, haciendo pagar su pena, al infractor y a las víctimas.
................Podemos seleccionar tres películas con el mismo argumento para ver la evolución de este tema: Un lugar bajo el sol, de George Stevens, Delitos y faltas, también de Woody Allen, y Match Point, como culminación. En las tres, un hombre ve amenazado su matrimonio o amor, su futuro y su prosperidad por una relación pasional inconveniente. En todas ellas resuelven matar a la mujer con cuya relación se ve amenazada su tranquilidad. En la primera, Un lugar bajo el sol, el crimen se trata con prudencia y tibieza: George Eastman (Montgomery Clift ) no mata a su antigua amante (Shelly Winters); simplemente caen de la barca y, en vez de socorrerla de inmediato, la conveniencia le bloquea y ella muere ahogada (algo que él no confiesa, sino que se descubre solo). La ley funciona, el amor verdadero de Elisabeth Taylor le redime y el espectador queda satisfecho.

..........En Delitos y faltas, la intención y la decisión están definidas, pero el crimen pesa sobre la conciencia del protagonista de forma consciente y explícita. Por último, en Match Point el crimen se pospone, la conciencia aflora sólo en sueños, con los muertos recriminándole su acción, pero con la defensa que hace de sí mismo: tenía que hacerlo porque sus intereses se lo imponían. El triunfo de la propia supervivencia sublimada hasta la propia conveniencia. Como dice el mismo protagonista, “te acostumbras a esconder la conciencia debajo de la alfombra”. Y el final es impactante de puro realista: la culpa y el castigo se encierran en los límites de la conciencia humana. No hay Dios ni justicia cósmica que garanticen el castigo; la vida se rige por azar.

...........Una vez definido este tema hasta su extremo, sin tapujos, vayamos con el contraste que nos motiva.
..........Volvamos a Match Point. Chris Wilton posee una fuerte ambición por vivir en un mundo de lujo y prosperidad. Hasta ahí, posee la misma conciencia mediocre que cualquiera. La cuestión es hasta dónde es capaz de llegar por escalar y por mantener la posición alcanzada. ¿Cuál es el umbral de su moral? El espectador puede comprender su angustia, su debilidad, sus mentiras… Dependiendo de cada cual, puede empatizar hasta un punto u otro. Difícilmente hasta el final. Alguien que, por educación y tradición, era una persona moralmente “normal”, se convierte en un asesino calculador y despiadado. Se convierte, o se descubre como tal.

.............En el otro extremo, el capitán Gerd Wiesler se define por un status ideológico y social en en el que está perfectamente encajado. En el rigor extremo de la deshumanización que produce el fanatismo, su personalidad inicial queda retratada por la escena de apertura, donde está instruyendo a un grupo de posibles policías para aprender a interrogar. La humanidad es para él una traba, algo que tacha de incompetente al individuo que la posee. Su concepción del sometimiento a las normas y al Estado es radical, haciendo de tal sometimiento el valor supremo de su conducta y la ajena.Va pasando de la sorpresa a la admiración, y de aquí a la empatía, con una de las personas a quien se le encarga expiar, Georg Dreyman, hasta el extremo de salvar su vida, su obra y su posición a costa de la suya propia.
............La evolución humana que vemos en ambos es exactamente la opuesta. Cuando compra el libro de Dreyman, el hombre al que ha salvado −y que le ha redimido a él−, “Sonata para un buen hombre”, (dedicado a él desde el anonimato), su rostro final es revelador: no es una mera dedicatoria: se ha transformado, efectivamente, en un buen hombre.
............En ambas películas Dios está ausente. No hay ninguna referencia a un concepto de justicia superior, objetiva, cósmica. Nada que satisfaga los elementales sentimientos de justicia del espectador, con los que tanto se juega para engancharle.
...........A nadie impactaría ninguna de las dos películas si no fuera porque es inevitable verlas desde la conciencia. Al espectador no le afecta en absoluto el plato de balanza de los intereses, su vida es ajena a la trama. Por ello es un golpe a la moral, a la sed de justicia, que la vida se plantee en términos de puro azar. ¿Es cierto que, si Dios no existe, todo está permitido? Nos negamos a creer que realmente alguien pueda cometer crímenes a sangre fría y que la suerte le favorezca. Pero lo cierto es que eso es la vida, al menos en la medida en que la conocemos. La conciencia es un producto humano, no se da (no se sabe que se dé, sólo se puede postular) en la propia naturaleza. Y ahí es prácticamente imperceptible, porque la justicia en la vida es anecdótica. Pero es obvio que, sin la presencia de la conciencia del espectador, cualquiera de ambas lo dejaría frío o le habría servido, a lo más, de simple entretenimiento. La resolución de Match Point indigna, sobrecoge; el de La vida de los otroA nadie impactaría ninguna de las dos películas si no fuera porque es inevitable verlas desde la conciencia. Al espectador no le afecta en absoluto el plato de balanza de los intereses, su vida es ajena a la trama. Por ello es un golpe a la moral, a la sed de justicia, que la vida se plantee en términos de puro azar. ¿Es cierto que, si Dios no existe, todo está permitido? Nos negamos a creer que realmente alguien pueda cometer crímenes a sangre fría y que la suerte le favorezca. Pero lo cierto es que eso es la vida, al menos en la medida en que la conocemos. La conciencia es un producto humano, no se da (no se sabe que se dé) en la propia naturaleza. Y ahí es prácticamente imperceptible, porque la justicia visible en la vida es anecdótica. La ayuda que recibe Dreyman corre a cargo de otro hombre, que como tal puede poseer conciencia.
...........Es obvio que, sin la presencia de la conciencia del espectador, cualquiera de ambas lo dejaría frío o le habría servido, a lo más, de simple entretenimiento. La resolución de Match Point indigna, sobrecoge; el de La vida de los otros, produce el efecto contrario. da paz. En ambos casos, esas reacciones sólo son posibles porque el espectador, fuera de la trama, las contempla como desde la perspectiva de un dios.
.............¿Qué es, pues, la conciencia? Si no podemos justificar la moral por la constatación de un Dios premiador o castigador, tampoco podemos, al menos, negar la existencia de este componente humano. Gerd Wiesles arriesga su posición y su interés por favorecer a Dreyman, alguien que le ha mostrado otros valores, que le ha despertado esa humanidad que en él parecía muerta. Lo arriesga y lo pierde, pero no parece arrepentirse. Tirando de su carrito de cartero, desposeído de uniforme, de prestigio y de poder, parece sin embargo (y lo más importante, muy creíblemente) redimido.
.............Ambas películas están plagadas de metáforas, alusiones y matices dignos del más sucinto análisis. Pero por hoy baste plantear lo que la comparación de ambas muestra: la existencia de la conciencia, lo complejo e inexplicable de su naturaleza.




sábado, 25 de julio de 2009

Amanece que no es poco

AMANECE QUE NO ES POCO


José Luis Cuerda, 1989. Intérpretes: Antonio Resines, Luis Ciges, José Sazatornil, Enrique Sanfrancisco, Pastora Vega, Aurora Bautista, Cassen, Manuel Alexandre, Chus Lampreave, María Isbert, Miguel Rellán, Guillermo Montesinos, Rafael Alonso, Antonio Gamero, Gabino Diego.







.........¿A alguien se le había ocurrido que esta película puede no ser una simple comedia delirante, una simple guasa? ¿Que es más profunda y filosófica de lo que parece?

..........Veamos: un pueblo donde todo es lo contrario de lo que se puede esperar. Nos encontramos con unos "paletos" cultísimos, lectores y adoradores de Faulkner, donde para encontrar hospedaje basta con decir algo como "que venimos a hablar de Dostoyevski". Pero no es a esta paradoja cultural a lo que nos referimos. Esto no es más que una pincelada más acorde con el leit motiv último de la película: el choque, la contradicción, la realidad dada la vuelta como un calcetín.

..........Hombres naciendo del suelo, ese Resines que en vez de llorarle los ojos con el Sol, se ríe con la Luna, el borracho que en vez de ver doble se desdobla, los americanos que unos días montan en bici y otros huelen bien... Uno detrás de otro, son todo golpes a los esquemas cognitivos que configuran nuestra representación de la realidad. Pero esa representación, que creemos "lógica", ¿lo es realmente? ¿o es sólo fruto de la costumbre, de esa costumbre que genera el pensamiento inductivo?

.........Se encierra aquí todo un planteamiento representativo de la relación entre realidad y lenguaje, en cuanto el lenguaje es representación de la realidad. Ponemos palabras a aquello que nos representamos, pero ¿cuál es el origen de esas representaciones? ¿la lógica? No: la experiencia.

.........¡Qué gran película para ilustrar el pensamiento del no menos ilustre Hume! Aunque en su momento al pobre nadie le hiciera caso, le dio un vuelco a la filosofía con su crítica al principio de causalidad y su análisis de los juicios analíticos a priori y sintéticos a posteriori. Sí, esta película es todo un canto a la gnoseología y a la epistemología.
..........Más aún, y en la línea de la filosofía del lenguaje, cuánto nos ayuda para entender al gran Wittgenstein. Pongamos como ejemplo estas afirmaciones del primer Wittgenstein en el Tractatus Logico-Philosophicus:
3.02. El pensamiento contiene la posibilidad del estado de cosas que piensa. Lo que es pensable es también posible.
Y más abajo:
3.0321. Podemos sin duda representar espacialmente un estado de cosas que vaya contra las leyes de la física, pero no uno que vaya contra las de la geometría.
.........Wittgenstein nos plantea aquí que lo que es imaginable es posible. Más tarde, en su segunda forma de pensar que se conoce como "segundo Wittgenstein", romperá con la imagen del lenguaje como espejo del mundo y entrará en sus metáforas del juego, o la caja de herramientas. He aquí que también parece ilustrarse esa intencionalidad del lenguaje. ¿Por qué nos parecen hilarantes frases cuyo sentido quizá ni entendemos? ¿Qué decir de esa sublime frase de "Alcalde, todos somos contingentes, pero tú eres necesario"? Y puestos a hablar de reglas del juego representativo de la realidad, pensemos en ese salto metafísico hacia el problema de la identidad con el actor sin papel, el reparto de los turnos de prostitutas, el suicida fracasado... Sí, don Calderón de la Barca, la vida puede bien entenderse como un teatro.

.........La culminación de la película nos la ofrece ese Saza de guardia civil pegándole tiros al sol al grito de "esto es un sindiós".
.........En efecto, puedo imaginar, como quiso explicar Hume, que un día el Sol no salga por donde es habitual. Puedo concebir un mundo con otras leyes físicas. Podemos imaginarnos (bien lo sabrán los padres cuando sus hijos entran en el fatídico tema) que venimos de la tierra, como las plantas (ya planteó algo así Aristófanes, recordemos su discurso de los hombres bola en el Banquete de Platón). Y todo esto en una película española, de trascendencia únicamente para una generación de españoles, que deberíamos reivindicar en toda la profundidad de su planteamiento. Y no lo digo con guasa. Al fin y al cabo, en España ha habido siempre mucha más filosofía en su literatura y en su arte que en sus ensayos.

.........En nombre de la enseñanza de la filosofía, gracias, José Luis Cuerda, por tan sublime aunque inconsciente ilustración.

martes, 7 de julio de 2009

Cortiblog 8

IMAGEN Y CONCIENCIA


........He aquí otros dos planos diferentes, pero con su punto de enlace. La siguiente pregunta fue ya planteada hace muchos siglos. Piensa tú:


¿Qué es mejor, ser justo o parecerlo?


........Hay personas capaces de tomar decisiones inmorales para parecer morales, y personas –por desgracia menos abundantes− que se juegan su imagen moral por obedecer a su conciencia. Lo que cualquiera preguntaría de primeras es: ¿qué se gana con ello? Ahí está la clave: el conflicto se produce entre los platos que forman esa balanza de la decisión que forman conciencia e interés.
........Antes de caer en el relativismo fácil, piensa que estás viendo una película, donde los personajes, obviamente, no saben nada de ti. Ajeno a los intereses que se desprenden, ¿qué sientes ante el malvado que engaña con su imagen? ¿Eres capaz de identificarte con él? ¿O más bien empatizas con el auténtico y sientes furor ante su desgracia y la ignorancia que le rodea? Pongamos algunos ejemplos ilustrativos: películas: Yo confieso, de Hitchkock, con Montgomery Clift (la decisión de sumir un silencio que puede acabar con él); Stella Dallas, de King Vidor, con Barbara Stanwyck (esa escena final de la boda, donde una madre se deja odiar por amor); La vida de los otros (Florian Henckel-Donnersmarck) en contraste con Match Point (Woody Allen) (la conservación de la imagen por interés hasta las últimas consecuencias, o la pérdida de todo privilegio e imagen social por descubrir la propia empatía hacia otros). Libros: Doña Perfecta.
........Busca alguna referencia de estos títulos si no los conoces. Y atrévete ahora a plantearte la gran pregunta:

¿Qué es la moral?

viernes, 26 de junio de 2009

Matrix









MATRIX

PRESENTACIÓN

La película se basa en una actual interpretación del mito platónico de la caverna: plantea unos prisioneros encerrados, inconscientes de su condición (hay un momento en que Morfeo, describiendo la realidad de Matrix, lo retrata tan paralelamente que no puede ser sino una alusión intencionada). Neo se desata de las cadenas, al igual que el filósofo platónico, porque busca la verdad.

Aunque en el mito no se explicita cómo un prisionero escapa, aquí parece que se quisiera indagar un poco más en el tema, reflejando la vida internáutica de Neo, aunque ello no ofrece mayores consecuencias filosóficas. La verdadera realidad, además, cuando Neo toma la pastilla, se muestra como una pérdida, o quizá mejor un “más allá” del conocimiento sensitivo: su cuerpo se transforma. Cuando aparece en esa otra realidad, al igual que en la referencia platónica, Neo no puede usar sus ojos, la luz de ese otro mundo le ciega, “porque nunca los ha usado”.
La película es un replanteamiento del tema a partir del fenómeno de la realidad virtual. Los juegos de ordenador, las simulaciones espaciales... La indistinción realidad-sueño fue planteada, con  todas sus consecuencias epistemológicas, por Descartes. 

La película presenta, además, algunos dilemas morales importantes, que pueden plantearse desde distintas perspectivas. Veamos algunos:

El principal, ¿qué es mejor, aceptar una verdad amarga o disfrutar de una mentira placentera? Es más, ¿dónde está la clave para distinguir una de otra? Tendemos a ser más cartesianos en nuestra tendencia a sustancializar y buscar una realidad exterior. Hume es más radical en los límites que pone al conocimiento: solo nos constan nuestras impresiones. "Bienvenido al desierto de lo real", dice Morfeo. ¿Es así, está desierta la realidad? Es un planteamiento muy fenomenológico. También Mouse dice que el ser humano se define por sus impulsos. Aunque él se refiere a los físicos (perspectiva muy nietzscheana) yo planteo otro tipo de pulsiones, entre las cuales está también la pulsión de verdad. Quizá no siempre (casi nunca) pese más que otras, pero me parece innegable negar que el ser humano la tiene, y ello nos lleva a concebir una necesaria realidad fuera de nosotros.

          Otro gran debate que plantea la película gira en torno al problema de la libertad y el destino. Podemos desglosar al menos dos preguntas: 1) ¿Somos realmente libres? y 2) ¿Qué es la libertad?
              La primera se plantea especialmente en torno al oráculo. De antemano sabía que Morfeo lo encontraría, que Trinity se enamoraría de él... Sabe de antemano que Neo es el "elegido", pero se ve obligada a mentirle (al menos, a ocultarle la verdad) para que se cumpla ese destino. ¿Se puede entonces controlar el destino? El destino lleva a Neo a donde le lleva: a ser él quien controle el suyo propio.
El tema de la voluntad es crucial en la película. Frente a nuestra voluntad (y a menudo contra ella) solemos chocarnos con el destino, la fatalidad. El ser humano, en este mundo, está sometido a unas leyes físicas de las que es imposible escapar. Desde el “más allá” (el mundo real) se les puede matar, desenchufándoles. En nuestro mundo, parecemos sometidos a “fuerzas ocultas” o designios que no comprendemos y que no podemos eludir. Ser dueños de nuestro destino, someter nuestra vida a nuestra voluntad, pasa por la comprensión de las leyes que rigen el mundo. En el dominio de la naturaleza ha resultado obvio. ¿Puede extenderse más allá del dominio de ese determinismo natural? 
        En cuanto a la segunda pregunta, Neo y Trinity argumentan con Cypher en sendas ocasiones que Morfeo “les ha liberado”. ¿De qué libera exactamente? ¿De qué somos esclavos? Es, de nuevo, el problema de los esclavos de la caverna: ¿nos esclavizan las apariencias? ¿Qué grado de esclavitud tienen los que manipulan las figuras que generan sombras? En este sentido, la película ofrece casi tantas interpretaciones como el propio mito. Las creencias sobre la realidad (incluyendo las leyes de la naturaleza), ideologías, religiones… aparecen como condicionantes para la búsqueda de una verdad más compleja y, sobre todo, más allá de las apariencias. La respuesta platónica es clara: de lo que debemos liberarnos es de la mentira y la apariencia. La verdadera libertad está ligada a la verdad. Pero la verdad no es siempre placentera, lo que sí es es difícil de encontrar.  decían los griegos. Lo bello es difícil. Y los placeres de Circe o los brazos de Calipso son tentaciones demasiado fuertes para abandonar el camino.
Otros debates éticos que se pueden derivar serían el del dominio de las máquinas sobre el ser humano –fundamentado en la analogía de la mente con el ordenador–, que cuestionan la definición misma del hombre como ser racional, es decir, si la razón es su esencia o si la razón es sólo algo que posee. Si antiguamente esta se presentaba como la clave para distinguirnos de los animales, ahora la necesidad de distinguirnos de las máquinas privilegia los sentimientos como definitorios de la naturaleza humana. Quizá la esencia humana, como ser distinto a las máquinas, sólo puede salvarse identificando al hombre con su voluntad.

Pero dejamos ahora la reflexión sobre estos dilemas, más aptos para ser debatidos. Vamos a ir señalando las alusiones y símbolos que aparecen en la película.


ALUSIONES Y SÍMBOLOS UTILIZADOS

Sobre el tema de la “otra realidad”, hay, al menos, las siguientes alusiones literarias:
· Alicia en el país de las Maravillas, de Lewis Carroll (“sigue al conejo blanco”) (sería interesante referirse aquí también a Alicia a través del espejo, por el mayor paralelismo que ofrece la realidad especular con la virtual: parece que, tras el cristal que separa nuestro mundo del de detrás del espejo o pantalla, hay un mundo funcionando, al margen de mi percepción).
· El mago de Oz, de Lyman Frank Baum (alusión al mundo de Oz y el camino que ha de seguir Dorothy), más célebre por su adaptación en la película del mismo nombre.

Personajes y símbolos religiosos

· “El elegido”

Aquéllos que conocen el "mundo verdadero", es decir, los iniciados, denominan así a su peculiar versión de un mesías que salvará al mundo de sus tinieblas. Neo (nuevo nombre que recibe tras su incursión en esa otra realidad) es presentado de esta forma, y se le considera destinado a salvar el mundo. Como suele suceder con este tipo de personajes, es inconsciente de su papel, y su origen es distinto al que pensaba. Cuando lo descubre, es cuando descubre su papel y se convierte, realmente, en elegido para salvar el mundo. Papel similar cumple Moisés en el Antiguo Testamento, aunque más claramente se alude a la esperada llegada de Mesías vaticinada por los judíos. En la tradición cristiana, el Cristo será Jesús de Nazaret, ese mesías largo tiempo profetizado.

· Cifra

En el original inglés, Cypher ¿Alusión a Lucifer? Representa, en efecto, al "ángel caído". Chypher elige volver a Matrix, caer de nuevo en la placentera prisión. El significado de la palabra “cifra” puede llevar la atención también hacia alguna interpretación relacionada con el mundo virtual: es una cifra más dentro de la “matriz” matemática que compone esa realidad creada y simulada a partir, precisamente, de cifras, de un sistema binario. La cuestión es que se plantea amante de los placeres, de la sensualidad. No solo nuestra tradición religiosa, también el orfismo presente en Platón plantea esa caída del alma, esa inmersión en la materia, a partir del enamoramiento de lo material por parte del caballo negro en ese magistral mito del carro alado.

· Morfeo

En la mitología griega, hijo de Hipnos, dios del sueño, y de la Noche. Su nombre (morphē, forma) se relaciona con su función de asumir formas humanas en los sueños de los hombres. El papel de este personaje aquí es similar en cuanto se presenta, como desde otra realidad hipnótica, a Neo en su mundo. La alusión al sueño aparece en varias ocasiones: cuando Neo pregunta al principio al cliente de grabaciones pirata si alguna vez ha tenido un sueño que pareciera muy real; cuando el mismo Morfeo habla a Neo de lo relativo de considerar más real el sueño o la realidad (ambos, al fin y al cabo, se experimentan igual, un fenómeno que ya utilizara Descartes...).

· Trinity

El nombre evoca directamente la Trinidad cristiana. Como personaje femenino, cumple un papel complementario al de Neo. Es obvio que el personaje está ideado para ser el contrapunto femenino del héroe, como no podía ser de otra forma en una película de acción, pero el nombre no deja de ser una referencia a un papel simbólico más allá.


· Otros nombres

Smith: el herrero. En la misma saga se relaciona con un pasaje de Isaías 54:16 ("he creado al herrero que sopla las ascuas en el fuego y crea un arma para su trabajo; he creado al destructor para destruir). El herrero aparece en la mitología griega como Hefesto, en la egipcia el dios Ptah es el creador artesano del mundo... Es frecuente que los dioses paganos se demonicen, aunque las alusiones pueden ser puramente bíblicas. También es el nombre más usado en la cultura anglosajona para referirse a "uno cualquiera" (en su pelea con Morfeo este le dice que "para mí eres solo uno más).
Mouse: clara alusión al ratón del ordenador. Su aspecto recuerda a un fauno o un sátiro... Personajes que representan la sensualidad de la naturaleza y su fertilidad. Mouse es quien le habla a Neo, precisamente, de esa sensualidad (diseña a la "mujer de rojo") y defiende que la naturaleza humana se define por sus impulsos.
Switch: interruptor. su relación con la tecnología es obvia.
Apoc: iniciales de Apocalipsis.
Nabucodonosor: el nombre de la nave (Nebuchadnezzar) es otra referencia bíblica: rey babilonio que conquistó Judá y destruyó el templo de Jerusalén.

· Agua


Neo aparece, en su acceso al “otro mundo” surgiendo de las aguas, símbolo del renacer, por el bautismo, por connotaciones freudianas y por un simbolismo arcaico universal (líquido amniótico; océano primordial...). Neo “nace” a la vida real saliendo de esa especie de útero o “matriz” en que se encuentra atrapado, como un feto, dentro de una especie de líquido amniótico. La similitud órfico-platónica es evidente. En este caso, se invierte el proceso que se describe en el mito del carro alado: Neo parece que nace a la realidad, no que cae en un cuerpo; en vez de olvidar su verdadera naturaleza, la descubre. Platón cuenta cómo el alma, en su caída, bebe de las aguas del Leteo, el río del olvido, y así nacemos sin recordar ese mundo arquetípico del que venimos. 

· El pecado de los hombres

Morfeo explica a Neo que, en la época en que se inició su lucha con las máquinas, al llevar al extremo se creación de la Inteligencia Artificial, los hombres “arrasamos el cielo”, clara alusión a la soberbia humana que en todos los mitos concluye con un castigo divino, como en el Diluvio universal. El conocimiento nuevo siempre ha asustado al ser humano; hay algo de miedo en la creencia de que robamos algo a los dioses; Adán y Eva comieron de la manzana del Árbol de la Ciencia del Bien y del Mal; la Torre de Babel simboliza un intento de los hombres de acceder a ese cielo divino; Prometeo robó el fuego a Zeus para dárselo a los hombres, y tanto el titán como la humanidad fueron castigados por ello... La lista de mitos donde se castiga esa soberbia es bastante larga.

· Sión

Aparece como el nombre de la última ciudad humana. Juega el papel de “tierra prometida”, como lo juega dentro de la religión judía, una de cuyas corrientes, el sionismo, toma su nombre de la concepción sacralizada de esta ciudad.

· Conócete a ti mismo

En la película, en latín, temet gnosce. En el original griego: gnosce s'autón. Se trata de la inscripción que aparecía en el frontispicio del oráculo de Delfos, como símbolo supremo de la sabiduría y del sentido de la vida. Es un elemento tomado de la religiosidad griega. En la película tiene un papel evidente: Neo tiene que saber de verdad que es el elegido, conocer todas sus potencialidades para poder ejercerlas. No basta con que lo crea, el conocimiento tiene que ser algo más profundo. Así es como consigue vencer a Matrix.

· La religiosidad hindú

Esta forma de pensamiento místico y religioso también queda retratada. Los niños que aparecen en la antesala del oráculo llevan una vestimenta que recuerda la estética de los monjes budistas. Su enseñanza es reveladora: “no intentes doblar la cuchara, porque es imposible. (...) Tienes que aceptar la verdad: que no hay cuchara. Entonces comprenderás que eres tú mismo quien se dobla”. La filosofía vedanta habla del “velo de Maya”, la ilusión de los sentidos que oculta la verdad. Esta propuesta es puro idealismo: es la mente la que crea y domina la materia, la única que, frente a ésta, es real.

· La Inteligencia Artificial: nuevas y clásicas inquietudes

       Es ya un tema muy recurrente presentar el futuro como un mundo distópico, donde la tecnología domina al hombre y le somete. En las inquietudes que genera el desarrollo de la IA encontramos dos tendencias opuestas: una optimista, viendo en ella no solo las capacidades de mejora que da a nuestra especie sino también la superación de la misma (el transhumanismo es su expresión más patente, una corriente de corte filosófico-religioso, que aglutina conocimientos de muy distintas disciplinas) y otra pesimista, negativa, que augura el fin de nuestra especie a manos de unos seres fríos, sin emociones, y tremendamente más inteligentes que nosotros. Nuestra ansia de superación, incluso de inmortalidad, es un clásico del espíritu humano, al igual que lo es la demonización de lo nuevo y desconocido, por el miedo que suscita, y su identificación con el pecado y el temor al castigo.

Otras alusiones y sugerencias

Lo que citamos a continuación no es entendido necesariamente como producto intencional, pero, sean o no intencionados estos otros elementos que sugiere la película, es interesante percatarse de ellos.
La persecución inicial de Neo tiene fuerte sabor kafkiano: no sabe por qué le ocurre eso (“no soy nadie; no he hecho nada”). La vida que lleva, y que conocemos por la descripción que hace de ella su carcelero-interrogador en las primeras escenas, es de lo más vulgar e inofensiva, y sin embargo se ve envuelto de repente en una situación de pesadilla, acosado, recibiendo mensajes de un móvil que no sabe de dónde viene, que le presenta una situación de peligro extremo.
El mundo de la “verdad” es opacado, ocultado tras una pátina sensual de impresiones placenteras. Esto, según explica Morfeo, “paraliza a la humanidad”, porque “impide la rebelión”. El paralelismo con la concepción marxista de la ideología, en sentido negativo, es manifiesto, y más en concreto con la religión como “opio del pueblo”.

El tema del oráculo está plagado de referencias. Lo más representativo es ese "temet gnosce" pero hay otras referencias interesantes. .Por poner unos ejemplos, nada más entrar en el edificio se ve sentado a un anciano de barba blanca con un bastón, ciego. Recuerda enormemente a la figura del sabio Tiresias, personaje de la mitología griega con capacidad profética; para los griegos la ceguera representaba no una mera carencia sino una renuncia a ver con los sentidos en pro de ver con el alma (tema muy platónico, que explica también el mito de Edipo). La sacerdotisa que les abre la puerta, el niño budista, hasta el hecho de que la pitonisa esté en la cocina (el fuego sagrado, el lar) y que fume.

En la película encontramos también una crítica a la naturaleza mezquina de la humanidad: hubo un tiempo en que se creó una primera Matrix, según narra el agente Smith, en que todo era perfecto. Pero no funcionó. Se plantearon fallos en el programa, pero lo cierto es que parece que el ser humano necesita inseguridad, sufrimiento. Llega a afirmar que su verdadera naturaleza no es la de un mamífero, sino la de un virus, ya que agota los recursos del medio en que se encuentre y tras ello ha de buscar otros lugares que explotar.
Esa humanidad, en su mayoría, tiene una dependencia radical de Matrix: no serían capaces de aceptar la verdad, de enfrentarse a ella. La ignorancia previa, el esfuerzo que implica el conocimiento y la comodidad que implica esa ignorancia en la que nacemos (a la que Cifra desea volver y que identifica con la felicidad) son los factores que hacen que la humanidad no pueda despertar de su estado prisionero de letargo. De forma más radical, la traición de Cifra obedece a la falta de asunción de esa renuncia a la comodidad y los placeres -aunque sean ficticios- tan dura de aceptar.
El “conócete a ti mismo”, simplemente señalado en la película, utiliza una máxima de sabiduría que bien puede interpretarse (aunque en la película no se haga) como el medio de romper las cadenas, la clave de acceso a esa otra realidad, la verdadera, que nuestros sentidos opacan.

El tema del conocimiento y de los sentidos, de resabios tan claramente órficos y platónicos, es un clásico del pensamiento humano. Si bien Platón presenta los sentidos como una especie de guía o apoyo para emular el verdadero conocimiento que nos lleve al mundo real de las ideas, en el Orfismo es indudable que los sentidos están de algún modo demonizados; en efecto, el cuerpo se presenta como "cárcel del alma", y en cuanto tal, fuente de todo tipo de impurezas que nos impiden acceder a nuestra verdadera naturaleza espiritual. Muchas interpretaciones y costumbres religiosas de diversas corrientes tienden a destacar esta misma visión denostada del conocimiento sensual. Aristóteles hará una reflexión más desapasionada y analítica sobre la relación de los distintos tipos de conocimiento, pero será en la Edad Moderna cuando el trasfondo gnoseológico de la cuestión adquiera mayor protagonismo, con el enfrentamiento entre el Racionalismo, con Descartes como más radical defensor, y el Empirismo, con Hume como máximo representante.


ANTECEDENTES CINEMATOGRÁFICOS
No era la primera vez que se planteaba en el cine el tema de la realidad virtual (Desafío total...) o el de las máquinas que superan al ser humano (Blade Runner...) y menos el de la realidad oculta o, cuando menos, otra realidad (adaptación de Alicia en el país de las maravillas, El mago de Oz, Rogger Rabbit y la incursión del mundo de los "dibus" en el de la naturaleza, la incursión uno en otro del mundo real y el cinematográfico en La rosa púrpura del Cairo...). En la actualidad el tema ha dado mucho más de sí, habiendo numerosos ejemplos de este tema como inspiración (Inception, Shuter Island...)
La inclusión de las artes marciales en el cine es demasiado prolífica para mencionarla, y en cualquier caso poco relevante. Pero podemos ceñirnos al retrato de cierto modo de entender el mundo como interpretable y vivible desde otro plano donde las leyes de la naturaleza pueden vadearse, se destaca cierta relación entre el cuerpo y la mente, muy asociada a la filosofía oriental y ejemplarizada en las artes marciales en las figuras de los guerreros samurais. Como muestra de este trasfondo podemos mencionar películas como Tigre y dragón, muy retratista de ese modo de concebir el mundo de esos legendarios guerreros, y la trilogía de La guerra de las galaxias (las primeras), inspirados en una obra japonesa, inspiración que en sus secuelas se queda en los meros límites de la estética.
Pero el planteamiento de Matrix sigue siendo único, en cuanto que lo que parece fantasía (que hay mucha, especialmente en esas capacidades de movimiento cuando luchan) de algún modo está enlazado con una realidad posible. El desarrollo de la Inteligencia Artificial y la posibilidad de transformar el cuerpo humano (que aunque aún no sea posible del todo deja muchas puertas abiertas a la imaginación) da pie a cierta pátina de credibilidad que implica más al espectador.



ANTECEDENTES LITERARIOS

Los anteriormente mencionados están explícitos. Pero el tema de la existencia de dos realidades y la incursión de una de ellas en la otra es muy antiguo. El especial estudio del espíritu humano, la diversidad de sus inquietudes y anhelos y sus distintos modos de conocer e interpretar cada faceta del mundo que aparecen en El Quijote son quizá el más destacado y profundo antecedente en este tema.
Muy directamente relacionado nos encontramos también con el conflicto existencial de Segismundo en La vida es sueño, de Calderón de la Barca; o ese "ser o no ser" del monólogo de Hamlet. Y sobre la aceptación de la realidad falsa, pero placentera, recordemos lo que dice el prisionero de La máscara de hierro, de Alejandro Dumas: “Dios mío, dame al menos sueños hermosos”.


ANTECEDENTES FILOSÓFICOS

Platón


La relación es obvia, en cuanto el tema es una versión del mito de la caverna (ver en libro VII de La República). La verdad se oculta tras el velo de la apariencia de los sentidos. Los apetitos carnales, sensitivos, nos alejan de la verdad. En la película, Neo comete el error, en el simulador, de dejarse llevar por la visión de la chica rubia. Su lujuria, en Matrix, le hubiera costado su salvación. Por otro lado, cuando están comiendo todos juntos en la realidad, la comida no cumple más función que la de nutrir. Los placeres sensoriales (el sabor, el aroma... que tanto aprecia Cifra al saborear ese filete artificial) sólo se disfrutan en el mundo ilusorio de Matrix, pero no son reales.
Pero también va más allá de Platón. Para éste, es obviamente deseable desprenderse de esta "cárcel del alma" que es el cuerpo. El mundo de las ideas es indiscutiblemente superior. Pero en Matrix queda patente que no hay garantías de que la verdad sea placentera. "Bien venido al desierto de lo real". En efecto, frente al idealismo platónico, aquí se plantea el tema de un modo más fenomenológico: qué significa "ser real".

Sigamos con Descartes:
La película comienza con la incómoda constatación de Neo de esa indistinción realidad-sueño. ¿Cómo sabemos si estamos soñando o no? Aunque Descartes no ofrece solución satisfactoria (el recurso a Dios es posterior al cogito ergo sum), en todo momento postula el dualismo entre lo real y lo percibido.
Frente a esta postura, Hume, también desde una perspectiva gnoseológica, supera esa dualidad haciendo de las impresiones (los datos sensoriales) el límite de todo conocimiento. Esta postura está más cercana a la conversación en que Morfeo plantea a Neo cómo definir lo real: si real es lo que sentimos y percibimos, la realidad pueden ser ondas cerebrales, impulsos nerviosos...


Heráclito dijo que la única diferencia entre el sueño y la realidad es que el sueño no es compartido por todos. ¿Y si todos compartiéramos el sueño de una matrix? La caverna platónica.  ¿Cómo saber cuál es la "verdadera realidad"? Éste sería el planteamiento cartesiano. Hume se plantearía más bien: ¿tiene sentido esta pregunta?
Otro antecedente del dualismo realidad-apariencia es Kant. El famoso filósofo de Könisberg establece una clara distinción entre fenómeno y noúmeno. El primero es lo que se manifiesta, lo que se aparece a los sentidos (del griego fainomai, aparecerse). El segundo, lo que las cosas son en sí. Pero en Kant la realidad se vuelve inaccesible al conocimiento humano: es imposible alcanzar la realidad tal y como es (la "cosa en sí"), puesto que el conocimiento es una forma de procesar la realidad de modo que ésta se me pueda mostrar siempre, pues, como fenómeno.





Actividades.1.

I. Brevemente, trata de explicar el sentido de las siguientes frases y añade algún comentario de cualquier otra escena o diálogo que te haya llamado la atención:
؞   (En el desarrollo de la IA) “los humanos arañamos el cielo”.
؞   “Bienvenido al desierto de lo real”.
؞   “¿Qué es real? ¿Cómo defines lo real? Si estás hablando de lo que puedes sentir, lo que puedes oler, lo que puedes saborear y ver, entonces lo real son simplemente señales eléctricas interpretadas por tu cerebro.”
؞   “Negar nuestros propios impulsos es negar lo mismísimo que nos convierte en humanos.”
؞   “Creo que los seres humanos como especie definen su realidad a través de la desdicha y el sufrimiento. Así que el mundo perfecto era un sueño del que su cerebro primitivo se trataba de despertar constantemente.”
 
1.       ¿Cuántas alusiones míticas aparecen? ¿Qué sentido tienen en la película o cómo se usan aquí?
 
2.       ¿Cómo se compone aquí un universo mítico (el mito de Matrix) y qué aporta a nuestro universo cultural? Analiza para ello 1) el contexto de actualidad (la Inteligencia Artificial), 2) el bagaje cultural mítico y 3) la naturaleza humana: de contenido: qué inquietudes universales se siguen reflejando, y de formato: cómo se mantiene y qué poder tiene el formato de narración-personificación.
 
3.       Busca otras películas de ciencia ficción que traten de algún modo el tema de la Inteligencia Artificial, los avances tecnológicos o el futuro. Muy brevemente, comenta cómo lo tratan o cuál es el tema de la película.
 
4.       El señor de los anillos, La guerra de las galaxias, Harry Potter… Son ejemplos de otros universos míticos de la actualidad. En realidad, casi podemos encuadrar aquí cualquier película que da lugar a secuelas, o algunas series que se hacen míticas… ¿Cuáles crees que están más de actualidad? ¿Cuáles son tus favoritos y por qué?
 
 
Investiga sobre qué es y cuál es el estado actual de la IA (Inteligencia Artificial).

PROYECTO INTELIGENCIA ARTIFICIAL

 

En grupos de no más de 4 personas, se distribuyen los temas siguientes, uno por cada grupo:

1.       Qué es: desarrollo hasta nuestros días. Perspectivas de futuro.

2.       Conflictos éticos o morales de la IA. Planteamientos en el cine y en la realidad.

3.       IA y epistemología. Dificultades para conjugar el pensamiento humano (mitos, religión, analogía) y el algorítmico. 

4.       Emociones. Sentidos y razón. ¿Qué define al ser humano? 

5.       IA y religiones. Transhumanismo, finalidad, los dioses (Golem). 

6.       IA y formas de gobierno.

 
Se trata de elaborar un vídeo, tipo documental, sobre el tema, que dure entre 5 y 10 minutos.


IV. Apariencia y realidad
La doble realidad, la verdad y la apariencia, tiene múltiples lecturas. ¿Cuál o cuáles te planteas tú? Piensa, por ejemplo, alguna de éstas u otra y coméntalo:
؞   ¿Son las leyes de la naturaleza como un programa de Matrix? ¿Podrían ser de otro modo?
؞   ¿Son las diversas culturas como programas informáticos? ¿Qué sería entonces “la verdad” que trasciende a esos programas?...
 
 
 
Cuestiones. 2.


¿Por qué el oráculo deja creer a Neo que no es el elegido?
Neo elige salvar a Morfeo aun a costa de su propia vida. ¿Por qué lo hace?
¿Qué impulsa a Cifra a ser enchufado de nuevo, una vez que ya conoce la verdad? ¿por qué pide no acordarse de nada, qué daño podría hacerle?
La doble realidad, la verdad y la apariencia, tiene múltiples lecturas. ¿Cuál o cuáles podrían ser las más destacables en la actualidad? ¿Son todas las apariencias malas? ¿Quién las crea o por qué existen, cuando se oponen a la realidad?

Pero la pregunta más radical no tiene tanto que ver con interpretaciones y búsquedas racionales, como con el conocimiento de uno mismo, de los propios pensamientos e ideas, pero sobre todo de las propias inquietudes. Como le dijo el oficial al estudiante en el conocido diálogo de Crimen y Castigo, de Dostoievski, "si no eres capaz de hacerlo, mal puedes justificarlo". Al ver la película, desde fuera, como meros espectadores, todos o casi todos tendemos a identificarnos con Neo, al menos a empatizar con él, en esa búsqueda de la verdad. Y sin embargo, pocos son verdaderos filósofos; pocos desean revisar sus prejuicios, arriesgar sus intereses, renunciar a los placeres.
Ahora, reflexiona sobre ti mism@. Mira en tu interior y piénsalo...


¿Tomarías tú la pastilla roja?

Esther C. García Tejedor